miércoles, 16 de septiembre de 2015

Una genialidad obvia: registro de las sesiones de coaching laboral



Por varias razones es interesante el registro de las sesiones de coaching laboral: para que no se escape ningún detalle, para captar sutilezas durante la comunicación en su propia forma (no olvidemos que para optar un puesto de trabajo nosotros somos el producto), para tener la opción de escucharla en el futuro medio y lejano, para facilitar un resumen posterior, para aprovechar las opciones que la tecnología nos da y tener el contenido de estas sesiones en el teléfono móvil, mp3, ordenador; también permite la corrección de contenidos en la parte auditiva de la comunicación: en lo que se dice.

Durante simulacros de entrevistas de empleo es frecuente que el/la candidata/a se distraiga y no se concentre en el contenido de su mensaje. Esta dispersión se detecta fácilmente mediante el audio de la sesión.  El entrevistador puede propiciar estos momentos de duda o sorpresa con preguntas inesperadas o gestos atípicos, dentro de la normalidad.

El tamaño de la información es también muy importante en la comunicación verbal: ante un “resume tu currículum” no se puede entrar al detalle de describir cada tarea de cada puesto de trabajo salvo petición expresa. Igualmente, ante una petición de tipo “explica un caso en el que fuiste lo resolutivo/a que anuncias ser” no se puede resumir una experiencia en cuestión de segundos, es el momento de entrar en detalles. Sería el momento de seguir el sistema STAR de entrevista.

En mi caso concreto las sesiones pueden barrer una amplitud de campos importante: informática, creatividad, conocimientos técnicos, comunicación, recursos offline, gestión de contactos, tests y juegos de psicología o coaching…. A veces es necesaria una segunda escucha de las sesiones para captar “flecos” a trabajar y puntos interesantes que se trabajarán en el futuro de forma conjunta o individual.

Después de las sesiones grabadas, siempre he recibido feedback positivo y comentarios al respecto que animan a mantener esta opción. El autoanálisis es importante en mis asesorad@s  y enorgullece apreciar las correcciones que ell@s mism@s se imponen y ejecutan. Las grabaciones en video son un paso más complicado y menos demandado, pero permiten el estudio del lenguaje no verbal.

No hay que olvidar que la relevancia de las características comunicativas del candidato/a serán más o menos relevantes en función del puesto de trabajo: importantes para un comercial o representante y poco importantes para un técnico de laboratorio o un gestor documental. ¿Irrelevante? Nunca.

Ya en el contrato con los clientes lo especifico, según pide la Ley de Protección de Datos: el uso que se hace de la información fruto de las sesiones  (al igual que mis métodos y materiales) no son susceptibles de ser difundidos. La información de la persona asesorada (registro de voz incluida) la controla ésta en todo momento, preservando su almacenaje y custodia más allá de la discreción.


El dispositivo de grabación que utilizo permite el registro en una tarjeta miniSD, de forma que la transferencia del archivo mp3 es fácil y rápida: a una memoria USB o, por Bluetooth, a un teléfono móvil. 

Invito a otros asesores a utilizar este sistema para que los asesorados aprovechen aún mejor las sesiones. Cuidado, no obstante, con el ruido de fondo, interferencias de instrumentación electrónica, custodia de la información y calidad del registro (mucha calidad implica un archivo enorme difícil de transferir). Se puede utilizar también un teléfono con aplicación de registro de voz o un micrófono unido a un ordenador, pero no son las mismas calidades.

martes, 1 de septiembre de 2015

Septiembre: plan de acción….¿coleccionables? ¿salto profesional? ¿gimnasio? You can do it!



Época de iniciar una formación o afición: septiembre. Vamos a escoger: ¿Cuál es el objetivo? ¿ocio? ¿mejorar tu perfil profesional? ¿reciclar conocimientos? ¿prescindir de servicios que ahora estás pagando?. Es importante tenerlo claro y definirlo de la forma más exacta posible, así sabemos a qué atenernos y cuántos recursos podemos dedicar.  Si no vas a disfrutar con una actividad y/o le vas a sacar rendimiento en algún aspecto, replantéatelo.

Podemos utilizar la técnica MARTE para tratar nuestro objetivo: Medible, Ambicioso, Realista, en un espacio concreto de Tiempo y Específico.

Recursos: Una vez que hemos determinado el objetivo de nuestra nueva/retomada actividad, vamos a dedicar ciertos recursos a ella: tiempo, dinero, dedicación personal, sacrificio de otras actividades… Debe estar equilibrado el esfuerzo que vamos a dedicar con el resultado de cumplir nuestro objetivo. Lástima que no se haya inventado un satisfactómetro eficaz para medir lo orgulloso que se puede estar de ciertas actividades o logros económicamente poco rentables, como el deporte, el coleccionismo o la fotografía.

Un ejemplo. Si queremos estudiar un idioma, podemos inscribirnos en una academia a hacer un curso, contratar un profesor particular, ir a encuentros en los que se hable el idioma que queremos aprender, leer libros adaptados para aprendices, hacer juegos de aprendizaje desde el teléfono móvil  o desde el ordenador, utilizar traductores, lecturas online, podcasts y programas de televisión,  plantearnos una estancia en el extranjero… De todas estas opciones, escogeremos aquellas que más nos acerquen al objetivo (concreto) que nos hayamos fijado: sin obsesiones y sin obligaciones más allá de lo que nuestro ambicionado objetivo marque. Sin esta ambición, da igual el objetivo, será difícilmente alcanzado. No conviene pasarse: alguien que haga todas las acciones propuestas se saturará y estará falto de tiempo (seguramente de dinero también) para otras cosas, lo cual puede desgastar enormemente y reducir el rendimiento.

Tenemos el objetivo que marca nuestra ambición y vamos a controlar los recursos. El más importante es el tiempo, ya que está limitado. ¿De cuánto disponemos? ¿podemos delegar? Fijaremos un calendario para cumplir las exigencias de nuestro ambicionado objetivo. Esto ayudará enormemente. En el caso de que pasados 21 días hayamos conseguido seguir la nueva rutina de trabajo, es muy probable que el proyecto siga hacia adelante. Si necesitas ayuda, puedes solicitarla para elaborar un Plan de Acción viable y eficiente. De hecho, si tu objetivo es una evolución profesional, cuenta conmigo o con perfiles similares, ya que disponemos de experiencia, contactos, referencias, formación y recursos varios que serán críticos para sacar el máximo provecho a tu perfil y a tu tiempo.

Con una fecha diana, unos recursos dedicados  y la ambición por combustible, el resto va rodado: un plan de acción conduce a un objetivo (y todas las sinergias que aparecen por el camino).

También podemos utilizar técnicas de PNL (Programación NeuroLingüística), completando la frase siguiente y leyéndola en voz alta (el oído ayuda mucho) antes de ir a dormir:

Dentro de _________ meses voy a (ser/estar en/dominar…) _____________ gracias a mi Plan de Acción y a mi dedicación y entusiasmo personal y frecuente.